Llegó a mi casa hace unos dias el boletín trimestral con las actividades que organiza el macba. Veo en la portada que en marzo se celebrará una exposición de Manolo Laguillo, uno de los fotógrafos vivos más importantes del país. Lo que me recordó una anecdota muy significativa sobre la consideración social de la fotografía.
Una profesora mia habia sido alumna de Laguillo. Y él, para ilustrar la baja consideración que el público de a pie tiene por esta profesión, explicaba que una vez la hermana de Laguillo le había pedido una foto hecha por él para regalar, que ella se la pagaba. El fotógrafo, muy amable, le dijo que no se la cobraba, ya que una foto suya cuesta como minimo unos 2.000 euros. Pero Laguillo le pidió un favor: para que la fotografía no se estropeara prematuramente por la erosión del oxígeno en combinación con los agentes químicos de la emulsión fotográfica, le pidió que comprara un marco de Ph neutro, que costaba unos 300 euros. Escandalizada, la hermana contestó:"Que dices, loco! Si no pensaba gastarme tanto!"
Eh, que la fotografia no es solo hacer clic! Esta profesión está infravalorada, todo el mundo tiene una camara compacta y cuando se le acaba el carrete lo llevaba al Fotoprix de la esquina. O si es una camara digital, se salta el laboratorio. Todos podemos hacer fotos: encuadramos, disparamos y si nos gusta la imprimimos, o la borramos. Y como lo podemos hacer todos, es lo más superfacil del mundo.
Y para demostrar que no es tan fácil como parece, periódicamente haré una entrada hablando de un fotógrafo famoso.
Aunque otros lo tienen mas facil
Escuchando - Smashing Pumpkins: "Love"
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